Alimentación mineral. Junto con el alimento principal, las aves necesitan un suministro constante de arena debido a ciertas peculiaridades de su sistema digestivo. Los ingredientes orgánicos e inorgánicos ayudan a triturar las semillas duras en el estómago de las aves y sirven como una fuente adicional de calcio, fósforo, sodio y otras sustancias minerales.
La coquina es la concha marina aplastada y represente una importante fuente de calcio, fósforo, sodio y otros minerales. La coquina se disuelve en el entorno ácido del estómago; las sales minerales obtenidas se absorben fácilmente por el organismo del pájaro. La coquina es especialmente necesaria durante el periodo de incubación para que las crías desarrollen una cáscara fuerte y tanto crías como adultos tengan picos y huesos sanos.
La caliza se obtiene de la molienda y secado de la calcita. La caliza es rica en nutrientes que fortalecen el equilibrio agua-sal y mejoran el crecimiento del tejido óseo.
El mineral «redstone» garantiza un funcionamiento adecuado del tracto digestivo de los pájaros. Un consumo frecuente de este mineral favorece la secreción de excrementos más sólidos.
La arcilla de suelo cámbrico es necesaria para la eliminación de sustancias tóxicas que pueden acumularse en los cuerpos de los pájaros. Además, la arcilla contiene minerales, sustancias orgánicas, óxidos de hierro y otros nutrientes beneficiosos.
La corteza de cedro triturada contiene una variedad de micro y macronutrientes. Además, tiene un componente absorbente, habiendo demostrado efectos astringentes, antimicrobianos y antiinflamatorios.
El carbón vegetal regula los niveles de acidez en el estómago de los pájaros y su consumo ayuda a prevenir enfermedades gastrointestinales. Debido a su elevada porosidad, el carbón vegetal es capaz de eliminar sustancias venenosas del cuerpo.